*Hallan tres ocelotes calcinados tras brutal quema de cañal
Enrique Ruiz Castro
Tlacotalpan
Un macabro hallazgo sacudió a la región del Papaloapan: tres ocelotes completamente carbonizados fueron encontrados entre los restos de un cañal incendiado en la localidad de La Amapola, en Tlacotalpan. Las desgarradoras imágenes, difundidas en redes sociales, han encendido la indignación y el dolor de cientos de personas.
El trágico descubrimiento fue realizado por cortadores de caña, quienes al ingresar para continuar labores se toparon con los cuerpos irreconocibles de los felinos, atrapados entre las llamas provocadas por la quema agrícola.
La denuncia estalló en Facebook a través de una organización de defensa de la fauna silvestre, que calificó el hecho como “una masacre silenciosa” consecuencia de prácticas agrícolas que cada año arrasan con la vida de animales en peligro.
Los ocelotes —una especie protegida y emblema de la biodiversidad veracruzana— habrían intentado escapar del fuego sin lograrlo, quedando reducidos a restos carbonizados que hoy indignan a toda la región.
Ambientalistas exigieron acción inmediata, asegurando que esta tragedia es solo la punta del iceberg de lo que ocurre en los cañales durante la temporada de quemas:
“Esto no es accidente, es consecuencia de la irresponsabilidad y la falta de control”, denunciaron.
La muerte de estos tres ejemplares ha reavivado la discusión sobre la urgencia de prohibir o regular de manera estricta la quema de campos cañeros, una práctica que hoy vuelve a dejar en evidencia el costo mortal para la fauna silvestre.
